Última actualización el octubre 23, 2023
Puede que conozca a Elon Musk por sus planes de colonización de Marte (SpaceX), su compañia multimillonaria (Tesla) o sus sueños de construir una red de túneles subterráneos por todo Estados Unidos (The Boring Company). Pero, ¿ha oído hablar de sus lanzallamas de $500?
El fenómeno del lanzallamas se refiere a un controvertido producto de consumo desarrollado y vendido por The Boring Company, una de las compañias de Musk.
Se presentó como una sorprendente incorporación a la gama de productos de la compañia y despertó rápidamente el interés de los consumidores. En consecuencia, provocó debates sobre su seguridad, legalidad e implicaciones en el contexto más amplio de la misión de la compañia.
Este artículo examina la cautivadora narrativa que hay detrás de la creación, lanzamiento y posterior controversia causada por este producto poco convencional.
Breve descripción de The Boring Company
The Boring Company, just like most of Musk’s ideas, started as a tweet. He was presumably stuck in traffic in Los Angeles on December 17, 2016, when he tweeted, “Traffic is driving me nuts. I am going to build a tunnel boring machine…”
Minutos después, añadió otro tweet que decía: “Realmente voy a hacer esto”.
En enero del año siguiente, Musk anunció la primera excavación, acompañada del eslogan de la compañia: “Boring, es lo que hacemos”.
Un mes después, la compañía inició su primer gran proyecto de prueba: cavar un hoyo de 50 pies de ancho por 15 pies de profundidad en las instalaciones de SpaceX.
¿Cuál es el fenómeno del lanzallamas de The Boring Company?
Para concientizar y recaudar fondos para los proyectos de The Boring Company, en diciembre de 2017, Musk anunció la venta de novedosos lanzallamas.
Sin embargo, Musk no empezó enseguida con el lanzallamas. De hecho, empezó a vender gorras de béisbol de The Boring Company a $20 cada una. Para promocionar las gorras, las colgó en Instagram con la leyenda: “La mejor gorra de la historia. Lanzallamas próximamente”.
At this time, no one knew that he wasn’t joking. However, he started selling flamethrowers when all the 50,000 hats were sold. And all 20,000 flamethrowers were gone in just four days for $500 each. As a result, he raised $10 million.
Se podría pensar que los lanzallamas son peligrosos y que podrían estar sujetos a restricciones particulares. Si bien es cierto que la normativa establece que mientras los lanzallamas no disparen llamas a más de 3 metros de distancia, la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de EE.UU. no tiene ningún problema con ellos.
Pero aun así, incluso Musk recomendó no comprarlos. Subtituló un vídeo de Instagram de sí mismo usando un lanzallamas: “Además, quiero dejar claro que un lanzallamas es una idea terrible.”
Añadió que nadie debería comprar un lanzallamas si no quiere divertirse. Y al parecer, a las 20 000 personas que compraron estos lanzallamas sí les gusta la diversión.
¿Cuál era la aplicación real del lanzallamas?
Según Musk, era “genial para asar frutos secos” y también podría resultar útil en caso de un apocalipsis zombi.
Como era de esperar, no todo el mundo estaba contento con que la gente comprara armas que pueden disparar fuego. El Ministerio del Interior recordó a los ciudadanos que, para los menores de 18 años, comprar cualquier imitación de arma de fuego era ilegal y que un lanzallamas era un arma prohibida.
Además, el miembro de la Asamblea de California Miguel Santiago se mostró indignado por la nueva idea de Musk. Quería que se prohibiera la venta del lanzallamas en California.
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Conclusiones
Entre los audaces empeños de Elon Musk, el lanzallamas de The Boring Company fue el más inesperado y sorprendente.
Aunque Musk es conocido por su innovación, la introducción de la venta de lanzallamas demostró su afición a mezclar novedad y polémica.
Comparado con algunas de sus ideas que despertaban curiosidad, el lanzallamas resultaba intrigante y dejaba perplejos con humor a muchos.